No quiero darme con rodeos, ni con palabras incompresibles que se puedan malentender… la verdad… solo quiero explicarme a mi misma unos cuantos asuntos escuchando el sonido de un piano y observando el esparcir de un humo gris revoloteando por mi dormitorio.
Prefiero ser honesta, prefiero ser fiel a lo que siento, prefiero mil veces decir un improperio antes de buscar palabras refinadas para acomodarme a cierta situación, y por eso la verdad me da en parte lo mismo que puedan comprender lo que quiero decir. ¿Tal vez un poco de desconsideración de mi parte? Bah~ pocos sabrán de lo que me refiero y con eso me sobra.
Estos días… ¿estas semanas? Como que ya perdí noción de cuánto tiempo ha pasado, mas este transcurso de segundos + minutos + horas no ha sido en vano… de alguna manera entré en un ciclo de reconsideración de mi actos y de mis pensamientos locos – incluso de esas ideítas bobas que brotan en medio de la noche cuando eres incapaz de dormir – es que había llegado el momento de hacerlo, estaban dadas las condiciones, incluso una causa inventada a la que culpo en este momento (o quizás simplemente no la quiero hacer tan parte de mi como debería ser).
Entre cada eco de un tic-tac había una conclusión, y lo absurdo es que esas conclusiones ya existían desde antes. Es como cuando lees un libro a cierta edad y lo encuentras sin sentido alguno, pero años después posas tu mirada por casualidad sobre él, le quitas el polvo, abres las paginas y quedas maravillado con la magia que te produce – como amor a segunda vista.
Sinceramente me sentí tan estúpida, se lo que tengo que hacer, se los pasos que tengo que seguir, incluso idealice lo que tengo que intentar sentir o pensar… pero es que no puedo. En tan irrisorio que el ser humano no pueda en su mayoría mezclar los pensamientos con los sentimientos… ¿acaso no puede existir una armonía entre ellos? ¿O porque es tan difícil lograrlo? Mente y Alma deberían complementarse… ¿o acaso el universo se empeña a la discordia?... No podremos ser perfectos – en realidad no intento ni siquiera serlo – pero ya no viene al caso.
[No entiendo. No entiendo nada. No te entiendo, créeme que lo intento y de cierta manera algo me impulsa a seguir intentando. Es extremadamente tonto (: ]
~ Después de no dejar escapar la mirada de la sombra que hacia mi ventana me di cuenta, solamente sucedió, me di cuenta de las cosas que de verdad importan, de la gente que me hace bien como persona, de lo que me ayuda a crecer, a unir un poco mas mi mente y mi alma, del descubrir un nuevo pilar en mi torpe subsistencia… pero también me di cuenta de al descubrir nuevamente toda esta magia estaba perdiendo al mismo tiempo algo demasiado auténtico para mi… estaba perdiendo ese sentir cálido, y duele perderlo, aun así cuando lo que más se lamenta es sentir que te afecta – y ahí es cuando viene ese enojo imbécil por sí mismo – es en ese momento cuando intento decir: No vale la pena, no tendría porque… simplemente no, nada de eso vale la pena sentir tu rostro húmedo y un sabor salado en los labios, y menos lo que de verdad quiero oír saliendo de mi boca.
Demasiado loco para ser verdad.
Dices que vengo, que voy
Que siento, que escucho, que pertenezco
Que sirvo para mucho
Que me estremezco […]
“Mar El Poder Del Mar” – Facto de la Fé
Prefiero ser honesta, prefiero ser fiel a lo que siento, prefiero mil veces decir un improperio antes de buscar palabras refinadas para acomodarme a cierta situación, y por eso la verdad me da en parte lo mismo que puedan comprender lo que quiero decir. ¿Tal vez un poco de desconsideración de mi parte? Bah~ pocos sabrán de lo que me refiero y con eso me sobra.
Estos días… ¿estas semanas? Como que ya perdí noción de cuánto tiempo ha pasado, mas este transcurso de segundos + minutos + horas no ha sido en vano… de alguna manera entré en un ciclo de reconsideración de mi actos y de mis pensamientos locos – incluso de esas ideítas bobas que brotan en medio de la noche cuando eres incapaz de dormir – es que había llegado el momento de hacerlo, estaban dadas las condiciones, incluso una causa inventada a la que culpo en este momento (o quizás simplemente no la quiero hacer tan parte de mi como debería ser).
Entre cada eco de un tic-tac había una conclusión, y lo absurdo es que esas conclusiones ya existían desde antes. Es como cuando lees un libro a cierta edad y lo encuentras sin sentido alguno, pero años después posas tu mirada por casualidad sobre él, le quitas el polvo, abres las paginas y quedas maravillado con la magia que te produce – como amor a segunda vista.
Sinceramente me sentí tan estúpida, se lo que tengo que hacer, se los pasos que tengo que seguir, incluso idealice lo que tengo que intentar sentir o pensar… pero es que no puedo. En tan irrisorio que el ser humano no pueda en su mayoría mezclar los pensamientos con los sentimientos… ¿acaso no puede existir una armonía entre ellos? ¿O porque es tan difícil lograrlo? Mente y Alma deberían complementarse… ¿o acaso el universo se empeña a la discordia?... No podremos ser perfectos – en realidad no intento ni siquiera serlo – pero ya no viene al caso.
[No entiendo. No entiendo nada. No te entiendo, créeme que lo intento y de cierta manera algo me impulsa a seguir intentando. Es extremadamente tonto (: ]
~ Después de no dejar escapar la mirada de la sombra que hacia mi ventana me di cuenta, solamente sucedió, me di cuenta de las cosas que de verdad importan, de la gente que me hace bien como persona, de lo que me ayuda a crecer, a unir un poco mas mi mente y mi alma, del descubrir un nuevo pilar en mi torpe subsistencia… pero también me di cuenta de al descubrir nuevamente toda esta magia estaba perdiendo al mismo tiempo algo demasiado auténtico para mi… estaba perdiendo ese sentir cálido, y duele perderlo, aun así cuando lo que más se lamenta es sentir que te afecta – y ahí es cuando viene ese enojo imbécil por sí mismo – es en ese momento cuando intento decir: No vale la pena, no tendría porque… simplemente no, nada de eso vale la pena sentir tu rostro húmedo y un sabor salado en los labios, y menos lo que de verdad quiero oír saliendo de mi boca.
Demasiado loco para ser verdad.
Dices que vengo, que voy
Que siento, que escucho, que pertenezco
Que sirvo para mucho
Que me estremezco […]
“Mar El Poder Del Mar” – Facto de la Fé
